01 mayo 2007

Teoría de los Sentimientos Morales y la Simpatía I

En el siglo XVIII el pensamiento acerca de la cualidad del ser humano como tal, buscaba dilucidar los elementos que conformaban su naturaleza. Es así como Adam Smith se cuestiona la trascendencia de los sentimientos y su relación de convivencia con los otros. En su obra, Teoría de los Sentimientos Morales, Smith explora la relación y efectos que los sentimientos y la moral provocan en el comportamiento del hombre cuando éste dice relación con algo que le sucede a otro, presentando en forma descriptiva la realidad sicológica que se ofrece al considerar la conducta de las personas, por tanto, la moral de Smith no es normativa como la ética de Aristóteles, sino descriptiva.

A partir de esta naturaleza humana, un individuo –que es un ser eminentemente social, ya que no sólo sería incapaz de vivir solitariamente, sino que además necesita de la colaboración de la sociedad para vivir y defenderse - siente un natural interés por lo que sucede con otra persona. De esta forma, surge una suerte de reciprocidad, en tanto los sentimientos de felicidad de otro individuo repercutan positivamente en uno mismo. Al mismo tiempo, frente a hechos de carácter negativo, afloran en uno sentimientos de compasión o lástima. Definiremos entonces, a los sentimientos como emociones o impulsos de la sensibilidad hacia lo sentido o imaginado como bueno o como malo. En términos valóricos, una persona considerará que algo es bueno o malo -principio aprobatorio- según las experiencias que ésta haya vivido, es decir, el valor de las cosas no se refiere a lo que ellas poseen, sino sólo a lo que nosotros les atribuimos.

De esta forma, más que una opinión, cuando tratamos temas morales y valóricos, emitimos un juicio racional con respecto a una situación dada -el juicio es cualquier afirmación susceptible de ser considerada verdadera o falsa y se debe acompañar de una explicación o fundamento-.

Acá nos detendremos un momento para explicar con más detenimiento el principio aprobatorio. Éste determina que aprobemos o no la conducta del otro, según el grado de simpatía que sintamos respecto de los sentimientos y motivos que éste tuvo en dicha conducta. A raíz de esto, uno puede: a) preferir una manera de comportamiento a otra distinta, b) a considerar buena una forma de actuar y mala la otra y c) establecer, que la conducta buena, es un objeto digno de aprobación, honra y recompensa y que la conducta mala, es de culpa censura y castigo.

Sobre el principio aprobatorio se han establecido, según Smith, tres explicaciones diferentes:
1) en primer lugar, se encuentran aquellos que aprueban o no las propias acciones -así como las de otro-, sólo por amor a sí mismo; en este sentido, sienten una propensión a ser felices o desgraciados;
2) en segundo lugar, se encuentran aquellos que se apoyan en la razón, en el entendido de que esta facultad nos permita distinguir entre lo verdadero y lo falso, y nos habilite a reconocer lo que es conveniente e inconveniente, tanto en nuestros actos como en sus efectos;
3) finalmente, se encuentran los que entienden que la distinción entre lo bueno y lo malo, depende de un inmediato sentimiento y una emoción que obedece a la satisfacción o aversión que sentimos al contemplar ciertos actos y emociones.

Los juicios morales aprobatorios o desaprobatorios en relación a esta situación, se enmarcan dentro de las facultades que posee la naturaleza humana para fundar con certeza dichos juicios. La base sobre la que está enmarcada esta certeza es la simpatía. Ésta, no es una intuición afectiva, ni inmediata, ya que tanto humanos, nuestra sensibilidad frente al dolor o el placer ajeno nos hace cuestionarnos e imaginarnos las sensaciones que el otro vive. La imaginación en este punto es de vital importancia, debido a que sólo por medio de ésta, uno puede llegar a concebir las sensaciones y sentimientos que el otro tiene o vivencia. Gracias a ella, la mente humana crea una representación propia de dicha vivencia, extrapolando nuestros sentidos en base a las sensaciones ajenas que percibimos. Si bien, estas sensaciones que nosotros adoptamos como nuestras no tienen el mismo grado de profundidad, nos permiten formarnos una imagen muy cercana de lo que le otro vive, tanto es así, que diera la idea de ser una misma persona.
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5 Comments:

Blogger Mis Nuevos Aires said...

me gustó tu post.. sorry lo perdida.. pero he vuelto!
Los juicios morales tal como se expone es algo tan propio.. regirse bajo los cánones de la supuesta sociedad para saber que es lo debido y lo que no , al final solo vale lo que nosotras sintamos..
Cuesta juzgar a un cercano.. Yo he dejado de hacerlo.. porque hace mucho que el resto tampoco me juzga..

Cariños!
Clau

4:53 p.m.  
Blogger ZEVLAG said...

Hola don R:

Acabo de leer su blog. Así es, human nature. La empatía se relaciona directamente con ello. Nos podemos acercar a la situación del otro. Pero muchas veces se comete el error de prejuzgar como en aquel dicho "uno ve caras y no corazones" o "mira con quién andas...". Al final, todo es relativo.

Nos estamos leyendo

Que estés bien

SL2

9:26 a.m.  
Blogger @slz_ said...

por eso hay que tener una ética livianita como la mia. y si no le gustan mis principios morales, pues tengo otros.

4:47 p.m.  
Blogger ::: Isis ::: said...

Interesante forma de leerlo.

Es algo tan personal al final de cuentas, cada uno lo vive de diferente formas esos sentimientos y la moralidad.

La sociedad impone tantas cosas, pero al final de cuentas no deja vivir libremente quien eres.


Cariños!

1:12 a.m.  
Blogger la muchacha de los ojos triztes said...

bueno de razonable no tengo mucho creo que me caracteriso un poco mas con lo de las emociones y tambien creo que la mayoria lo hace, por sierto la mayoria se suele equibocar pero al final creo que cuenta nuestra propia desicion sea correcta o no aun que aveces dejamos de lado cualquier tipo de valor o moral por mas arraigados que estos esten...y creo que hoy en dia la gente no se fija mucho en lo que le pasa al resto y solo vive su vida asi que de simpatia nos va quedando bien poco ...saludillos

2:34 p.m.  

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