Estado de Chile: su Fragilidad de Memoria y Doble Standard

Breshnev y Honecker (ideólogo del Muro de la Vergüenza)

Santiago de Chile, primavera de 1994, fallece el sanguinario, torturador y tirano del régimen criminal comunista de mayor represión política en el bloque soviético, el dictador de la República Democrática Alemana (RDA), Erich Honecker. Resulta curioso que internacionalmente, no se le juzgara por razones de salud (eso me recuerda a algo…) y que viviera sus últimos años en paz y tranquilidad que su país ‘amigo’ Chile le estaba brindando (ah pero esperen… claro… se me había olvidado mencionar que en el exilio de Bachelet, también habían otros políticos chilenos que lo apoyaban, como Ricardo Núñez, Camilo Escalona, Jaime Estévez, Jaime Gazmuri y Enrique Correa, entre otros quienes vivieron en la Alemania del Este).

Fue así, como el Estado Chileno que siempre boga por la defensa de los DDHH permitiera otorgarle asilo político a este dictador comunista, el cual estuvo 18 años en el poder, y el que es responsable directo de cientos (sino miles) de asesinatos de ciudadanos alemanes que intentaron cruzar el conocido “Muro de la Vergüenza” (alrededor de Berlín entre 1961 y 1989) y que fueron asesinados en el intento, o aquellos que por resistirse al régimen también fueron acallados. Vuelvo a insistir, esta historia me suena familiar… pero continuemos.

Fue así como este dictador que estaba refugiado en la embajada chilena en Moscú con la ayuda de Clodomiro Almeyda, consiguió por medios de sus contactos en Chile que le otorgaran un salvoconducto para que pudiera salir de ahí y burlar la orden de extradición que la ahora Alemania Federal le había impuesto, y llegara posteriormente a Chile a pasar sus últimos días. Por lo mismo, gozó del status de un ex Jefe de Estado, lo que se llama un Asilo Top. Lo más curioso era que sus ‘amistades’ chilenas lo ayudaran tanto, y se olvidaran de los DDHH de los alemanes, hicieran vista gorda a los asesinatos y a la dictadura comunista, pero que contradictoriamente tengan la desfachatez de condenar a sus adversarios políticos por los mismos excesos y errores… Parece que a estas personas se les olvida la existencia de un aparato represor llamado Stasi por medio de los cuales sojuzgó, dividió, torturó y asesinó a miles de sus propios compatriotas alemanes por oponerse al yugo soviético. El 3 de mayo de 1974, Honecker había declarado ante el Consejo de Seguridad que convenía" seguir haciendo uso de las armas en las fronteras sin miramientos".

Afortunadamente, estos procesos aún están vigentes en Alemania Federal, se han juzgado a medio centenar de personas, claro está, la mayoría de bajo rango, pero también a algún ministro, dirigentes comunistas, gente del partido, jefaturas etc. Como en la mayoría de los casos, al igual que acá, la mayoría fue liberado de sus cargos o sus sentencias conmutadas.

Como lo plantee en mi post del 13/11/06, cuántos pueden afirmar que son consecuentes y no se contradicen en sus actos??