Limache: el Peñasco del Brujo que encantó a Darwin

Limache es una ciudad de 40 mil habitantes ubicada en el centro de la Quinta Región, a 30 km de Valparaíso o a 140 km de Santiago. Se encuentra entremedio de valles generosos y fértiles y custodiado por el cerro de La Campana, Parque Nacional y Reserva Mundial de la Biosfera. Tiene un ambiente campestre y provincial, pausado y acogedor. Muy conocido en Chile es el tomate limachino, rojo fuerte y muy sabroso. Zona de viñedos, agrícola y frutícola.

Por el 1500 el valle estaba ocupado por los Picunches, teniendo contacto con los Incas, pero ya por el año 1780 no quedaban más de 150 indígenas nativos. Se cree que Limache proviene de los siguientes conceptos: Lli(peñasco) y machi (Brujo) ‘Peñasco del Brujo’. Dice la antigua tradición indígena, que el peñasco (Lli) del macizo La Campana relucía por el oro y pedrerías del lugar, y esto era codiciado por conquistadores. Sin embargo, los Machis o brujos usaron su magia para hacer que una noche cayera sobre La Campana una espesa capa de granito que finalmente terminó por ocultar sus riquezas.

En agosto de 1834 el naturalista Charles Darwin se encontraba maravillado con la vista del valle de Limache que pudo obtener desde La Campana y la cantidad de especies de flora y fauna que encontró en el lugar. Actualmente hay una placa conmemorativa La Campana, rodeado por rocas pintadas con mensajes de los mismo estúpidos inconcientes y tarados de siempre, que no saben valorar los monumentos de ningún tipo ni lo importante que es que futuras generaciones también puedan disfrutarlos.

Volviendo a Limache, esta zona huasa cuenta entre su historia con los famosos carros de sangre, que no eran otra cosa que caballos que tiraban estos carros (tipo trenes) y que muchas veces hasta los propios pasajeros debían ayudar a tirarlos. Hay muchas tradiciones que aún se mantienen, como la fiesta de la trilla, las competencias en el motódromo de las 100 millas de motociclismo, celebración de fiestas patrias y la celebración de las 40 horas de la fiesta religiosa Nuestra Señora Purísima.

Junto con Olmué y Granizo, Limache se presenta como una zona muy entretenida ser visitada, un lugar donde puede ir toda la familia, conocer parte de las tradiciones chilenas y disfrutar de la rica chicha, las buenas empanadas y los mejores tomates. A nivel turístico se puede mencionar la voluntad de esta zona por diferenciarse, por hacer algo innovador y entregarle un valor agregado a la parte vial. En vez de tener la tradicional señalética negra con letras blancas indicando el paradero, en Olmué se han dado el trabajo de hacerlos turísticos, teniendo un tomate con el número del paradero y un sombrero de huaso para complementar el diseño. Eso sí que es aunar fuerzas, voluntades y diferencias políticas, no como en Viña del Mar que por egos propios no se ha ha hecho algo similar.